Fernando Figueroa | El Universal
El músico Uwe Schmidt nació en Fráncfort, vive en Santiago de Chile y tiene decenas de alias como creador: Señor Coconut, Lassigue Bendthause, Atom Heart, Lisa Carbon, Flanger, etcétera. Como Señor Coconut –a quien se deben los discos El gran baile, El baile alemán, Fiesta Song, Yellow Fever! y Around the World– se presentará el viernes 29 de octubre en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas, dentro del Festival Internacional Cervantino, y el domingo 31 en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris del DF.
Tal vez las fuentes principales de las que abreva la música electrónica del Señor Coconut sean Yellow Magic Orchestra, Kraftwerk y hasta Martin Denny. Del alemán chileno son muy conocidos sus covers tropicalizados de “Smoke on the water” (Deep Purple al estilo Pérez Prado), “Riders on the storm” (The Doors) y “Beat it” (Michael Jackson).
¿Uwe Schmidt es a la música electrónica lo que Fernando Pessoa a la poesía?
No soy yo quien podría responder esa pregunta.
Cuando se ve en el espejo por las mañanas, ¿es Uwe, Señor Coconut u otro personaje?
Hay un solo yo, y lamentablemente es el mismo todos los días.
¿Salirse de las fórmulas no es otra fórmula?
Exactamente.
¿No tiene la foto de Juan García Esquivel en un altar?
No, pero tengo una tarjeta de San Pérez Prado que llevo siempre.
¿No debería vivir el Señor Coconut en La Habana o Veracruz, en vez de Santiago de Chile?
No. En La Habana o Veracruz haría tecno.
¿Se atrevería a crear un tema acerca de los 33 mineros chilenos recién rescatados?
La actualidad es populista. No hay nada más aburrido que la llamada actualidad. No veo tele, no tengo radio, no leo el diario, estoy en mi propia actualidad, es decir en mi propio realtime, que lo encuentro miles de veces más interesante que la picantería que se ve en los medios. No hay que olvidar la jerarquía: el arte está por encima de la realidad. No hay que bajarse a la actualidad, porque tu trabajo se transformará en un bostezo de corta vida. Además, la actualidad contiene cierto morbo y perversión. La historia de los mineros, por ejemplo, se debería tocar con mucho respeto y cuidado. Encuentro patético al “artista” que necesita un evento así para poder crear.
Usted pone a bailar a los “antreros” de medio mundo. ¿Qué tal baila?
Bailo muy bien, pero sólo en privado. Hay poca música que me mueve.
¿Qué le gusta y qué le disgusta de personajes como Bono y Jagger?
Bono es una lata. Jagger no es de mi gusto, pero encuentro divertida su onda, ¡por lo menos no es aburrido!
Alguna vez Esquivel me dijo que el concepto “easy listening” le parecía inadecuado para un tipo de música difícil de crear. ¿Qué piensa?
Da lo mismo cómo se llama un tipo de música. Es un nombre que ni siquiera se le ocurrió al compositor sino a gente ajena a la música. Obviamente ese nombre no describe la intención ni el proceso de creación sino algo externo: el marketing. Claro que a Juan García Esquivel no le provocó mucha gracia que su música se clasificara como “easy listening”. Estoy seguro que su impulso de creación, inspiración y motivación nada tenía que ver con ese concepto. También encuentro que la música de Esquivel no encaja muy bien dentro del “easy listening”. García Esquivel es mucho más nervioso, no es lineal; hay quiebres, complejidad, que son elementos ajenos al “easy listening”.
¿No es un exceso crear “covers” de “covers”?
Cultura es mutación.
¿La música superficial es algo serio?
Me haces reír.
¿Le gusta que lo definan como “retrofuturista”?
No me gusta. El “futurismo” me da lata. Hace más de cinco años dejé ese discurso. No me interesa lo futurista, lo progresivo ni la idea del retro. No opero en la línea del tiempo común. Para mí, todo existe en un tiempo, lo que es ahora. “Retrofuturista” quiere ser chistoso y listo a la vez, pero es una definición media tonta, la verdad.
Una pregunta al diseñador gráfico: ¿Quién es el pintor más importante de la historia?
Es imposible decirlo. Encuentro irrelevante hablar de la importancia histórica porque no es una sola. Ningún pintor existe de forma aislada. Eso de los top 10 es un invento moderno y una concesión a lo vulgar.
¿Cómo son sus depresiones?
Quizás no me lo van a creer, pero no me deprimo. A lo más, algo me da lata o rabia; nada me llega a deprimir.
¿Las drogas le sirven para crear buena música?
Todo lo sicodélico lo encuentro útil, pero sólo en momentos de recreación, no de creación. Como estoy creando todo el tiempo, honestamente no tengo mucho tiempo, espacio y energía para las drogas. Encuentro que, en general, más bien frenan la productividad. Prefiero estar sobrio.
¿Hace una forma de magia?
Suena cursi, pero el proceso como aparece la música y como se transmite lo encuentro demasiado mágico.
¿Cuáles estereotipos de los alemanes son ciertos y cuáles falsos?
Es cierto que parecen fríos, pero sólo al primer contacto; cuando se abren, son muy cálidos y profundos. Es cierto que son perfeccionistas, estructurados y disciplinados; también son rígidos. Es falso que no tengan humor. Es falso que no tengan swing. Es falso que no tengan funk.
¿Tiene “hobbies”?
No. El hobby es un invento para empleados que tienen que llenar su tiempo libre con otra actividad. No soy empleado, no tengo tiempo libre ni tiempo de trabajo, y por lo tanto el concepto del hobby no cabe dentro mi estructura de vida. Cuando un artista empieza hablar de hobbies es un signo de que se ha aburrido de su arte.
¿Cómo se imagina al Señor Coconut en la Alhóndiga de Granaditas?
No me gusta imaginarme algo. Prefiero la sorpresa del momento.
¿Es feliz?
Sí.
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