Sin proponérselo, Tanghetto nació como una agrupación que reclamaba el derecho a renovar lo que para muchos tenía punto final. "El tango tiene el derecho de ser música de este tiempo también".
La afirmación es de Max Masri, líder del quinteto que en el domingo acompañó los Días del aire en Ciudad del Río, y para quien su presencia en los escenarios, tras casi un década, demuestra que el electrotango no es algo pasajero ni una corriente menor del género.
Según él, buscar un punto de encuentro entre el bandoneón y el sintetizador "era como meterse con la abuela". Algo parecido debió pensar en su época un incomprendido Piazzolla, quien hoy hace parte del Olimpo del tango.
Masri empezó a hablar de electrotango a finales de los noventa. Luego, una camada de músicos experimentaron con él y escribieron con aquella relación 'incestuosa' un nuevo capítulo en la larga historia del género que ahora incorpora nombres como Bajofondo o Gotan Project.
Rodeado de un ambiente familiar lleno de mascotas, picnics y cometas, el líder de Tanghetto habló con EL COLOMBIANO sobre la vigencia del tango y su última concubina, la electrónica.
¿Ser invitados a festivales como el de Medellín significa legitimar el electrotango dentro del tango universal?
"Nosotros empezamos a tocar en el Festival de Tango de Buenos Aires en el 2004. Y a partir de ahí tocamos en muchos festivales de Europa y algunos de Estados Unidos. Me parece que ya las respuestas están. A nosotros el público siempre nos incorporó. Uno de los primeros shows importantes que hicimos fue en el teatro San Martín, en el Mundial de Tango. ¿Qué más se puede decir? Siempre hay como una facción que trata de mantener el tango añejado, como en ese viaje en el tiempo, cuando el tango tiene el derecho de ser música de este tiempo".
¿No es algo pasajero entonces?
"Tanguetto lleva nueve años. Cuando sacamos el primer disco había un crítico que decía que la moda ya había pasado. Miraban que había estado Gotan Project en el año 2001, pero a mí la moda nunca me interesó. Es más, Tanghetto es bastante original y diferente al resto de los grupos de esta corriente. Tenemos muchos elementos de tango, tocamos tango tradicional. Para aquellos que digan que es algo pasajero, ya quedó demostrado que no".
Y ahora ustedes incorporan también instrumentos de orquesta como el chelo...
"El tango surgió de la fusión de diferentes estilos de música. Cuando se originó en el conventillo era un poco el habanero, la milonga, la payada y era como a ver que salía, como un jam . Nosotros no tenemos límite y buscamos agregarle sonoridades o intentar cosas diferentes. En la orquesta típica el chelo no está, como tampoco están los sonidos de sintetizador. El tango se va a mantener vivo a nivel artístico mientras haya diferentes opciones y otros elementos que lo nutran".
En el contexto actual, ¿es posible el surgimiento de una voz como la del tango clásico?
"El uruguayo Tabaré Leyton es un cantante bastante interesante porque tiene la escuela absoluta del tango. Tocó en el Salón Canning y estaban estos tangueros de la vieja guardia aplaudiéndolo. Tiene todas las raíces del tango para poder intentar hacer algo nuevo y diferente".
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