Fuente: informador.com.mx
Sin rodeos y mostrando por qué son una de las leyendas de la música, The Chemical Brothers desplegaron un sólido concierto en el Foro Alterno de la Universidad de Guadalajara, ante más de nueve mil fanáticos que gozaron de un show lleno de euforia y sofisticación.
En punto de las 21:40 horas, una cortina de luces se apoderó del escenario, instante en el que aparecieron las figuras de Tom Rowlands y Ed Simons, los dos “padres” del concepto que le cambió el rostro a la música electrónica en la década de los años noventa y que sigue siendo uno de los referentes musicales alrededor del mundo.
Con el disco Further como novedad bajo el brazo, The Chemical Brothers presentó un set que combinó lo más granado de su pasado con diversos temas de hechura reciente, siempre apoyados en un ambicioso juego de luces y una pantalla gigante que desplegó gráficos para acompañar cada una de las melodías, además de gozar de un sonido perfectamente calibrado.
Muy en el estilo de los creadores de Hey boy, hey girl, el contacto con el público no se dio a través de palabras, sino de señas y música. El dúo inglés levantó los brazos y aplaudió cuando fue necesario para que el público entrara en comunión perfecta con ellos, o mejor dicho, para hacer la química perfecta con sus fieles seguidores tapatíos.
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